Dirtyroulette (también conocido como “Flinsgter”), como su nombre deja adivinar, es la versión porno de Chatroulette.
Se trata de un chat aleatorio destinado al sexo virtual. Su funcionamiento es el mismo del de su hermano mayor: Uno enciende su cámara y puede chatear con extraños escogidos al azar. Sin embargo, si en Chatroulette la proporción de hombres es abrumadora, aquí es, literalmente, casi imposible dar con alguna cámara que no sea un miembro viril, o, cuanto menos, un torso bien peludo.
Para sortear los penes y poder hablar con alguna fémina, deberemos pagar la suscripción que va de los 6,99 USD por una semana, hasta los 14,99USD mensuales por 6 meses de uso. Y con ello tendremos acceso al filtro por género, entre otras funciones fundamentales para chatear por este sitio.
Como punto positivo a destacar, cabe destacar que es un chat bien moderado y no es habitual encontrarse con perfiles falsos que traten de colarnos publicidad o cosas peores.
En definitiva, Dirtyroulette es un chat aleatorio de sexo que va al grano. A nadie escapa que en este chat se viene a tener sexo virtual y por lo tanto, no da lugar a equívoco. Sin embargo y justamente por esto, por ser un chat centrado en el sexo, es un chat en el que escasean las mujeres y, por lo tanto, si queremos acceder a ellas, deberemos obligatoriamente pasar a la versión de pago.



















